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Para cocinar con gusto y ganas hay que saber abrir el campo de posibilidades. No tener demasiados hábitos, estar dispuestos a probar, experimentar, renovar, perfeccionar, equivocarse a veces sin olvidar que esto es un juego en el que no siempre se gana… Pero para poder descubrir nuevas combinaciones y dejar libre su imaginación en materia culinaria, hay que tener a mano las diferentes materias primas de las que se dispone. Ver una especia o un condimento nos puede incitar a usarlo. Si se encuentra en el fondo de un armario, quizá no tendremos la idea de usarlo. Con todo a la vista en un estante de pared, en cambio, usted podrá inspirarse a partir de lo que dispone. Estantes estrechos le permitirán tener presentes todas las especias y no olvidar ninguna mientras elabora sus platos. Estantes de pared más anchos le permitirán tener acceso a los libros de cocina, donde encontrará ideas y recetas para renovar cada día sus creaciones.
Más allá de tener a la vista sus especias, también podrá utilizarlas con fines decorativos. Los botes que las contienen pueden crear la identidad visual de su cocina. Utilice frascos opacos para que la luz del día no altere sus especias demasiado rápido, si usted desea usarlas para cocinar. ¡Podrá recuperar botes antiguos comprados en mercados de antigüedades para componer su propia colección ecléctica! Varios tarros transparentes con especias de diversos colores pueden aportar toques de color perfectos para su cocina. ¿Qué sería de un cordero biryani si se olvidase del clavo, o de un gratinado de patatas sin su hoja de laurel? ¡Tenerlo todo a su disposición hará que no se le olvide nada! Tener a la vista las diferentes especias disponibles le permitirá utilizarlas más regularmente y que no se echen a perder. En efecto, las especias que utilizamos poco tienden a desmejorar, a perder el sabor, el color e incluso algunas a volverse rancias (de ahí la importancia de los frascos opacos para su conservación). Tener un acceso fácil a ellas resultará en un uso más regular de sus existencias y no se verá obligado a tirar las especias porque se hayan deteriorado. Así también ahorrará dinero, que en materia de especias puede ser considerable.
Los estantes TEEbooks son fáciles de cuidar, se pueden limpiar con un simple paño húmedo y agua tibia con jabón. No tendrá necesidad ni de cera ni de laca para mantenerlos, ¡están hechos a prueba del tiempo! La cocina es la parte de la casa donde se generan la mayor cantidad de residuos (vapor, grasa, salpicaduras…) y es importante contar con materiales que se puedan limpiar sin precauciones especiales. Es un importante ahorro de tiempo para todos aquellos que no tienen especial pasión por la limpieza y el mantenimiento del hogar. ¡Los estantes de pared Teebooks son perfectos para terminar de limpiar en poco tiempo!